Revisión ITV

Antes de pasar la ITV a nuestro vehículo es recomendable realizar una revisión previa, con la que nos aseguraremos de que nuestro coche se encuentra en perfecto estado y no dispone de ninguna falta grave que nos impida pasar correctamente la ITV.

Esta revisión incluye fundamentalmente:

Revisión del sistema de frenado

Discos, pastillas, latiguillos y líquido de frenos.

Revisión de neumáticos

Comprobar que la medida, el índice de carga y el índice de velocidad son los correctos para el vehículo. Verificar el desgaste y estado de los neumáticos.

Revisión del sistema de dirección

Verificando rótulas y brazos de dirección.

Revisión del sistema de suspensión

Verificación visual de los amortiguadores y del conjunto de rótulas y brazos de suspensión para descartar la existencia de holguras.

Revisión del sistema de transmisión

Comprobar el estado tanto de fuelles como de las transmisiones y juntas homocinéticas.

Revisión del sistema de iluminación

Verificar que todas las luces funcionan correctamente y chequear faros y pilotos para descartar que haya algún desperfecto.

Revisión dentro del vehículo

Verificar si en el cuadro hay encendida alguna luz de avería de cualquiera de los sistemas, comprobar cinturones de seguridad, claxon…

Revisión en el exterior del vehículo

Comprobar el estado de matrícula, paragolpes y el correcto funcionamiento de cerraduras, elevalunas y limpiaparabrisas.

Revisión en el compartimiento motor

Revisar niveles, comprobar batería y verificar que no hay pérdida de líquidos ni goteo de aceite.

Comprobación emisiones de gases

Para vehículos diesel